L o L a, Lolita

Hoy tengo que presentaros a Lola, Lolita para los amigos.
Así es como bautizó Senia a este bellezón porque todavía no tenía nombre.

Es un cruce de Golden con... no se sabe muy bien. Parece ser.

Y tiene entre tres meses y medio o cuatro meses. Apareció en un monte. 

Resulta que hoy, día de la Hispanidad, Aldabra y Senia fueron a la Protectora. El veterinario, un chico muy majo (según contaron) vino a vacunar a los peludos y a controlar las cosillas que surgen y encontró a Lola muy debilucha. Dijo que le vendría muy bien estar unos díítas con una familia, para controlar las comidas, el medicamento, las caquillas... Y Aldabra y Senia, sin pensárselo mucho se la trajeron a casa.

Entre nosotros; a mí no me hizo mucho gracia, la verdad y por eso, me he ido a dormir con Senia a casa de los abuelos. 

Es que eso de ser el único y de repente, sin consultarme ni nada, aparecer con una perrilla muy mona... NO es de recibo, ¿a qué no? Menos mal que yo tengo buen caracter porque si no armo la marimorena.

Es que tengo miedo, no quiero que dejen de quererme, y quieran más a Lola, yo creo que eso no pasará porque todos me quieren mucho pero... tengo miedo.

¡Que lío! A mí me haría mucha ilusión tener un hermanito o una hermanita pero... Creo que todavía no estoy preparado.

Aldabra le preparó arroz y se lo dió con una latita porque el veterinario dijo que era muy importante que cogiera peso. Y Senia repartió fotos por wasap, por Facebook, por tuenti, a ver si alguien se anima a adoptarla pronto. ¡Ojalá!

Y eso es todo por hoy, amigos.
Os seguiré contando la historia, a ver qué pasa.
Muchos lametones para todos.